Nuestros amigos misioneros

Por Laura Arrigo (maestra de sala de 4 años)

Se ríen a carcajadas.
Te abrazan con el alma.
Agradecen cada acto cotidiano.
Saludan a su bandera con dignidad.

Guardapolvo blanco y tierra colorada.
Caminan kilómetros para llegar, se cuidan, juegan, cantan.

La escuela alberga su Ser niño.
¡Gracias a la vida, a mis compañeros y a la maravillosa tarea que compartimos!